El estrabismo se produce cuando los músculos que controlan los movimientos de los ojos no están coordinados correctamente. Esto hace que los ojos no se muevan en la misma dirección al mismo tiempo. Esto puede ser causado por una variedad de factores, desde problemas de salud subyacentes a problemas visuales, como la miopía, el astigmatismo o la presbicia. También puede ser causado por problemas del desarrollo, como la falta de coordinación, los nervios lesionados, daños cerebrales, problemas del desarrollo craneofaciales, trastornos neuromusculares y enfermedades hereditarias.

Para prevenir el estrabismo, es importante que consultes regularmente con un oftalmólogo para detectar cualquier problema de visión temprano y recibir el tratamiento adecuado. También hay algunas medidas que puedes tomar para prevenir el estrabismo.

Estas incluyen evitar la fatiga visual, llevar gafas con lentes correctivas si tienes problemas de visión, mantener una buena postura al mirar objetos lejanos o cercanos, evitar la exposición prolongada a la luz brillante, descansar adecuadamente y hacer ejercicios para fortalecer los músculos de los ojos.